Luego de un bien aprovechado receso, retomamos nuestra producción semanal. Volvemos a la Carga con el Blog, Las Vitrinas, los Tecno-Lunes y los Domingos de Opinión, entre otras cosas más.
Fue un receso forzado debido a que tenía que atender otros asuntos, cosas muy importantes a nivel personal.
Como recordaran este Blog se inició para resaltar aspectos relevantes que hubieran ocurrido durante la semana. Situaciones de la vida diaria, vistas con mucho humor y sacándoles una enseñanza positiva.
En esta ocasión hablaremos de las mudanzas.
Durante todo lo que llevo de vida… me ha tocado mudarme dos veces. Muy poco en comparación con otras personas que conozco. Pues resulta que para mí, esto de andarse cambiando de casa no es tan fácil como suena.
Yo soy muy asiduo a la tradición y a las costumbres, a mis rutinas y estilo de vida. Una mudanza rompe de lleno con todas estas cosas.
En mi ingenuidad, nunca imaginé que el mudarse conllevara tanto trabajo, uno ve en las películas o la tele, la gente muy reída… cargan dos o tres cajas… los ves divertirse pintando una pared, y de forma muy romántica, untarse un poco de pintura en la nariz para luego revolcarse jugueteando… (Dejando esa pared a medio palo) y después cambia la escena y la casa esta divina y hasta con perro en el jardín.
Pues NOS MINTIERON SEÑORES!!!!!, yo vine con la idea de cargar dos cajetas y pintar media pared… y la realidad fue otra.
Llevo casi tres semanas de estar tratando de terminar de pintar todas las paredes, y todavía no he podido revolcarme juguetonamente con nadie.
En mi caso fueron 9 cajas… y dos acarreos, y ni les hablo del agravio de esperar a las diferentes compañías para que vinieran a traerme los muebles comprados, armarlos o concertarme los servicios… en esto si tengo que hacer la salvedad… me sorprendió la eficiencia de Cable Onda, de Conway y de Econoprecios Furniture, mucho que desear de Raenco… pero sigo sintiendo que aun con la desorganización y falta de palabra (me dejaron tres días seguidos plantado), la compra allí fue muy buena.
Interesante comprender que el recibir un departamento vació y blanco, es todo un reto… hay que comprarle cuanto puedas imaginarte, desde los coladorcitos del fregadero, hasta las obras de arte más vanguardistas. Hay que pasar de ferreterías a mueblerías, de tiendas de casa a supermercados. Tienes que escoger la pintura que combine con tus gustos y tus muebles, encontrar toallas que hagan juego con las baldosas del baño, destapar cañerías y hasta limpiar los closets.
Además, debes conocer a tus vecinos, y sobre todo, llevarte bien con ellos. Hacer una buena impresión con la Administración y volverte amigo de los conserjes, y ni se te ocurra cantar a todo pulmón a las 10 pm… ya comprobé que esto no está bien visto, qué poco aprecio tienen algunos por las expresiones culturales genuinas.
Lo importante de todo esto es que nuestra casa será una vitrina de nuestra vida y de lo que llevemos por dentro, al recibir visitas estarás compartiendo parte de tu intimidad y de tus pensamientos. Te sometes a las críticas y comentarios de todos aquellos que no te ayudaron ni un poquito, pero igual los miras con una sonrisa hipócrita y les dices “lo tendré en cuenta.” Hay que ser pacientes… posiblemente ellos también tengan en la cabeza la idea de la mudada en dos cajetas y la revolcada romántica en pintura, jajajaja el efecto Hollywood.
Pero ya después de que vas superando todas estas dificultades, es que vas encontrando lados muy positivos que hacen que todo el sacrificio valga la pena.
El tener retos como este, van permitiendo que uno encuentre sentido a su vida, y sobretodo, aprecie el gran valor del esfuerzo y trabajo propio, y qué decirles del apoyo de tus familiares y amigos, cada persona involucrada juega un papel muy importante.
Hay que tener presente que el mudarse es sólo el comienzo de una nueva etapa, lo mejor está por verse.
Si por casualidad de la vida te toca mudarte, planifica bien todo lo que hagas y cuida tu presupuesto. Antes de comprar muebles, mide los espacios disponibles; antes de escoger la pintura, ten en cuenta los colores de los muebles que vas comprando y antes de cargar el camión de mudanza… cerciórate que ese día podías mudarte según el reglamento de copropiedad de tu nuevo edificio o barriada XD. Pero por sobre todas las cosas disfruta cada paso y no te abrumes, el construir un hogar es un trabajo no de unos días, sino de varios años.
_F.G.
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Ferney (sábado, 22 marzo 2014 12:12)
Has Una oprtunidad de disfrutar unas segunda mudanza y no las has pasado tan mal como pudo haber pasado. Te cuento yo me he mudado muchas veces en mi vida he perdido la cuenta solo en este año y 3mese que llevo en Panamá van 6 veces y aun me emociona el hecho de cambiar de habitad pues la monotonía empieza en el hogar. No se cuando llegue la mudanza a mi propia apartamento pero planeo hacer el amor en el suelo del apartamento con mi pareja todo lleno de pintura sobre un plástico para cuidar los azulejos jajaja. Siento que Ya es hora de una ultima mudanza. Abrazo bonito blog